domingo, 28 de septiembre de 2014

CRÓNICA (J6): SUMA Y SIGUE.

"El Chelsea vuelve a vencer". Parece que los aficionados del Chelsea están acostumbrándose ha escuchar esta frase cada semana que transcurre, y con razón, los blues solo han cedido dos puntos frente al Manchester City, el resto, lo cuentan por victorias (5).

Ayer, fue el turno del equipo de Paul Lambert, que había realizado un buen comienzo de temporada, ocupando la tercera posición en la tabla. Además, los villanos contaban con una larga lista de bajas, entre las que se incluyen posiblemente a sus dos mejores hombres (N.Baker y Benteke), piezas clave en el esquema del técnico escocés, más mérito aún.

Como viene siendo habitual, el Chelsea salió al campo con ansia de presión, ahogó a su contrincante y en el minuto seis, Oscar hizo el primer gol tras un pase de Willian que había tirado y con fortuna el balón le volvió a caer a los pies. Muy mal la defensa del Villa que cometería errores de todas las maneras posibles en el resto del encuentro. A partir del gol, dominio claro y absoluto de los blues durante todo el encuentro que se fueron al descanso con un resultado corto para el trabajo realizado.

Como de todos los aficionados a la Premier es sabido, el Chelsea de los últimos años y concretamente del último, no destaca por su juego posicional. La llegada de Cesc Fábregas ha proporcionado el equilibro que se necesitaba. El catalán, desarrolla el juego del conjunto londinense y en partidos contra rivales inferiores que meten 10 jugadores atrás (precisamente los rivales que se atascaron la campaña pasada y le dejaron fuera de la lucha por la Premier League), da uso a su grandiosa visión de juego para tirar pases entrelineas que rompen continuamente las defensas rivales.

Influencia de los jugadores del Chelsea en el campo durante los 90 minutos
Jose Mourinho está consiguiendo un equipo 100% comprometido, donde todo el mundo trabaja para hacer el bloque más solido e impenetrable. Un claro ejemplo de esto es Hazard, que durante los últimos partidos ha comenzado a realizar las tan necesarias ayudas a su compañero Azpilicueta en el carril izquierdo.

La segunda mitad comenzaba con un Chelsea más frío, que realizaría sus peores minutos en el encuentro, algo habitual en muchos equipos tras pasar por el vestuario. Como comentaba en un párrafo anterior, el Chelsea no es o era un equipo posicional pero gracias a su pegada es capaz de hacer un gol en cualquier momento del partido. En el minuto 57 una magnifica triangulación ente Azpilicueta, Hazard y William, terminaría con el arrastre de 3 defensas por cortesía del belga y el brasileño, dejando al jugador navarro solo que pondría un centro a la cabeza de Diego Costa marcando así el 2-0 y su octavo gol en seis partidos. Con el Villa más roto que nunca, Diego Costa en una internada en el área sentó literalmente a 3 defensas
y tras su disparo blocado por Guzan, Willian solo tuvo que empujar el balón para hacer el 3-0 definitivo.

El Chelsea avanza a un ritmo imparable, solo en el partido de ayer consiguió un 92% en eficacia en los pases (637/695), funcionó muy bien en los tramos más estáticos del encuentro, no defraudó en su habitual pegada y asfixió al rival. Posiblemente esto solo sea el embrión del equipo que podremos ver en los meses finales de la competición.



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